Entrevista con la periodista Carmen Porter

© Juanca Romero Hasmen

El periodismo del misterio y estos asuntos relacionados con la Historia controvertida están en su mejor momento, sin duda alguna. Esta última década está sirviendo para dotar de credibilidad y herramientas palpables a la población, que cada vez más crítica, solicita este tipo de información. Papel fundamental están jugando los medios de comunicación, especialmente los más interactivos e inmediatos como la radio y la televisión, que en estos años ha logrado conectar desde la veracidad con la creciente demanda, al tiempo que se ha logrado distinguir a los charlatanes lee bolas y pseudo-aparecidos, de quienes ejercen desde el periodismo el derecho a documentar, informar y entretener. Siguiendo la estela que iniciamos el pasado domingo, he querido rescatar desde la fonoteca de Angulo 13 una interesante entrevista con quien sin duda, es la mujer referente en el periodismo de lo insólito. Carmen Porter, pieza fundamental en los programas Milenio 3 y Cuarto Milenio, nos ha brindado la ocasión para que la conozcamos un poco más.

Bienvenida a tu casa Carmen. Mi agradecimiento en nombre de todos los lectores de Angulo 13. ¿Arrancamos?… vamos allá. ¿Te persigue hoy en día algún fantasma de la infancia? -Muchas gracias por invitarme”. Es un placer. Arrancamos. Ninguno. De mi infancia solo recuerdo cosas felices con mis padres y mis hermanos. La verdad es que hasta el pediatra de mi infancia me llamaba la niña feliz” así que os podéis imaginar cómo era la vida con mi familia, allí no había oscuridad ni fantasmas.

Llevas muchos años realizando labores periodísticas aunque es indudable que el fenómeno social que ha supuesto Milenio 3 y después Cuarto Milenio ha relegado a un segundo plano la etapa anterior. ¿Qué recuerdos te quedan de esos primeros años de profesión? -Muy bonitos. La primera vez que vi publicada una noticia mía en Enigmas fue uno de los momentos más felices de mi carrera. Suponía salir de los medios de la Universidad (radio, tv y periódicos universitario…) y pasar a publicar en una revista de verdad, de las que se vendían en los quioscos. Tuve suerte porque desde que empecé la carrera me dieron la oportunidad de poder practicar en un medio de verdad. Primero con pequeñas noticias y más tarde con reportajes de campo. Era lo que más me gustaba.

De un programa de verano a un referente sobre estos temas en la radiodifusión mundial. ¿Un sueño hecho realidad o una realidad con la que jamás soñaste? -Mentiría si dijera que nunca lo soñé. Bueno más que soñarlo estaba convencida de que haríamos un programa en una radio a nivel nacional. Yo siempre soy muy positiva y creo que eso y trabajar duro ayuda a conseguir las metas que deseas. La positividad es esencial en la vida.

¿En líneas generales el periodismo del misterio que se hace en nuestro país está a la altura? – Bueno en la actualidad creo que estamos un poco en crisis. La gente ya no viaja como antes para sacar historias nuevas, la mayoría de jóvenes que quieren dedicarse al misterio se sientan en su ordenador visitan 4 páginas y creen que han hecho un reportaje. Internet es un arma genial para los periodistas, pero no está todo en la red. Lo bueno es que aún siguen quedando pequeños grupos de investigación que sacan a la luz las leyendas y casos de sus pueblos, de sus provincias… una labor encomiable. Además a través de la red no ves las reacciones de la persona a la que entrevistas, no sientes su calor o su frialdad ante tus preguntas, no la puedes mirar a los ojos e intuir si miente… Personalmente me dan mucha envidia los reporteros de Cuarto Milenio que están todo el día en la carretera y en el avión buscando el misterio.

Tras Milenio 3 y Cuarto Milenio hay muchísimas horas de preparación. ¿Cómo es un día normal de trabajo para Carmen Porter? -Cada día es distinto, eso es lo bueno de este trabajo. Me suelo levantar tarde porque me acuesto muy tarde (la noche es el único momento en el que el teléfono deja de sonar y puedo escribir o leer). Vamos al plató a grabar o a la redacción de la tele para montar el programa y a preparar con los reporteros los siguientes temas que se van a tratar. Las reuniones de redacción suelen ser bastante largas, ya que todo el mundo puede opinar y proponer cosas. Una vez a la semana todo el equipo, más de 30 personas, nos reunimos comentar el programa emitido y cerrar los temas, los invitados, el atrezo… Luego Iker se encierra con el realizador para revisar el programa y yo me reúno en mi despacho con los reporteros para asignarle a cada uno el reportaje de la semana y comentar como han ido los que acaban de traer.

El éxito es indudable y cuando este llega, también brotan las voces contrarias. ¿Afectan las críticas? -A mí personalmente no. Lo primero porque no tengo tiempo para leerlas. Y lo segundo cuando alguien quiere contármelas le paro. No quiero escuchar cosas negativas, bastantes tenemos en esta vida como para estar atenta a las tonterías que dice fulanito o menganito. Creo que la gente si en vez de pasarse el día en los foros o blogs criticando o viendo lo que dicen de él/ella invirtieran su tiempo en algo más productivo, mejor les iría. Además no ofende quien quiere sino quien puede.

¿Abruma saber que cientos de miles de personas aprenden, descubren, y se asustan cada semana con el fruto del trabajo del equipo de Milenio? -Da un poco de vértigo saber que a lo largo de la semana casi tres millones de personas te escuchan en algún momento. Pero emociona saber que haces compañía al camionero que está haciendo su ruta, al estudiante que prepara los exámenes y aprende contigo algo más de historia, a los vigilante que hacen la ronda antes porque después les da un poco de miedo, a las personas que se encuentran hospitalizadas y a los médicos y enfermeras que los cuidan, al matrimonio o la pareja que te hace saber que esa noche se unen mas para escuchar Milenio juntos, a las fuerzas de seguridad que te informan al momento sobre algo que se está viendo en los cielos… da vértigo pero a la vez una gran satisfacción llegar e influir en tantas personas y tan diferentes.

¿Es la Sábana Santa de Turín el gran misterio de la humanidad? -Yo lo defendí a capa y espada cuando en Milenio 3 hicimos que los oyentes votaran sobre su icono del misterio preferido. Para mí sí es uno de los grandes misterios de la humanidad. Imaginemos solo por un momento que el cuerpo que envolvió ese lienzo fue el de Jesús. ¿No tendríamos ahí la prueba más importante sobre todo lo que se ha escrito en torno a su figura? Tuve la oportunidad de ver la Síndone en el año 2000 y te aseguro que quien tiene delante a ese crucificado se estremece pensando en el dolor que tuvo que sufrir, crea o no, sea católico o no lo sea.

Creo que es innegable que los temas de misterio están de moda. ¿Ayuda este aspecto a la investigación o la entorpece? -Ayuda y entorpece. Ayuda porque nos llegan muchísimos casos que si no tuviéramos el programa de radio y televisión tal vez no podríamos acceder a ellos. Y entorpece porque antes podías pasar desapercibido en las investigaciones, ahora todo el mundo nos conoce. Eso en ocasiones entorpece el trabajo porque a los dos minutos de llegar a una localidad ya sabe todo el mundo que estas allí, pero en otros casos ayuda porque en lugares a los que no podrías acceder te abren las puertas por ser conocido.

Una breve incursión en lo personal, en lo cotidiano. ¿Son las mañanas una tortura a la hora de poner el primer pie en el suelo? -Totalmente. Soy noctámbula cien por cien. Por la mañana no doy pie con bola. Quien me conoce sabe que hasta determinada hora ni cojo el teléfono.

¿Recuerdas lo que es una siesta? -¿Qué es qué? Jajajaja (risas).

Ahora que no nos lee nadie, ¿No supone una sobredosis que después de estar horas y horas viendo la cara del jefe en el trabajo al llegar a casa la cara siga siendo la misma? -Para nada. Lo primero porque entre Iker y yo ninguno es jefe de ninguno. Somos compañeros en la aventura de la vida y del trabajo y eso para mí es un privilegio. Con los horarios imposibles que tenemos y el ajetreo diario sería casi imposible mantener un matrimonio, porque apenas nos veríamos. En cambio así podemos compartirlo todo. Además luego en casa cada uno tiene su espacio, cada uno está en su despacho y de vez en cuando paramos para tomar un té o una Coca Cola en la biblioteca.

Recordar los sueños no siempre es fácil pero… ¿Qué sueño confesable tienes siempre presente y pendiente de cumplir? -Gracias a Dios voy cumpliendo todos mis sueños. Cada cosa tiene un tiempo y hay un tiempo para cada cosa.

¿Cocinera o cocinillas? – Cocinera. Me encanta meterme en la cocina y según los comensales no lo hago mal.

¿Una carcajada de Carmen Porter cuesta…? – Nada. Me paso el día riendo.

¿Qué te da mayor pereza? – Levantarme

¿Lo dejarías todo por…? – Mi familia.

¿Un defecto que intentas corregir? -Digo siempre lo que pienso. A veces hay que suavizar las palabras porque no todo el mundo digiere lo que dices de la misma forma.

¿Te ves en un futuro haciendo otro tipo de periodismo? -¿Por qué no? El periodista lo que desea es contar. El único periodismo que nunca haría sería el económico. Pero tal vez me veáis algún día dirigiendo una revista de moda. Mi otro vicio junto con el misterio.

¿Se puede hacer Milenio 3, Cuarto Milenio, atender diferentes compromisos con los medios, escribir etc. Y no tener una blanca chaqueta con muchas hebillas? – Sí se puede. Además ayuda mucho que tu marido se dedique a lo mismo y que estés 24 horas con él.

En Angulo 13 siempre tienes las puertas abiertas. Muchas gracias. -Ha sido un verdadero placer.